sábado, 6 de junio de 2009

La ampliación de la autopista y la permanencia del Sporting

En Asturias vuelven a hablar de ampliar la autopista "Y" que une Gijón, Oviedo y Avilés. Ahora dicen que el tercer carril se hará a costa de eliminar la mediana y bajar la velocidad a 100 Km/hora. Esta autopista tiene algo más de treinta años y apenas ha sufrido modificaciones en todos esos años, salvo "pincharla" en multitud de sitios para volcar todo el tráfico en ella y hacerla intransitable.

Supongo que en el año 2040 la ampliarán colocando los carriles inclinados un ángulo de cuarenta y cinco grados, para no ampliar la caja y los coches deberán circular a 50 Km/hora. Con esa velocidad nuestro AVE alicorto y nuestras cercanías ferroviarias competirán muy ventajosamente con la carretera en el centro de la región.

Y nuestros políticos se felicitarán por seguir alcanzando logros para este paraíso natural.

Para entonces es muy posible que siga gobernando nuestro inefable Tini que, ni corto ni perezoso, abandonó el palco de El Molinón el pasado domingo para comparecer en rueda de prensa entre dos jugadores del equipo local.

Yo vi la foto en el periódico y, por un momento, pensé que el Sporting presentaba ya un refuerzo para la próxima temporada. Quizás Tini sea especialista en tirar faltas o en distribuir juego en el centro del campo, pensé. Descarté la posibilidad de que fuera a sustituir al porteroLafuente o que confiaran en él la velocidad del ataque. Pero pronto estuve convencido de la idoneidad del fichaje.

Sin embargo, cuando leí la noticia, me llevé una gran decepción: nuestro presidente no se iba a dedicar al deporte rey, sino que estaba en sus funciones de cobrador, pues, tal como indicaba el periodista, pronto hizo referencia a las muchas ayudas que había prestado al equipo y comparecía en el momento de la euforia por la permanencia para decirles: "chicos, parte de vuestro triunfo me corresponde".

Pero ya no estoy triste, porque sé que Tini es persona cumplidora de sus deberes y como el dinero de sus ayudas era nuestro, pronto comenzará a entregarnos nuestra parte; porque él no fue a cobrar para él, sino para nosotros, su pueblo, al que tanto quiere y que tanto le quiere.

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